Ya advirtió un servidor en su cuenta personal de Twitter que la semana pasada sería movidita en lo que a cuestiones institucionales se trataba. Algo que Diario de Sevilla confirmaría dos días después dándole repercusión al nuevo intento de Del Nido por asaltar la presidencia del Sevilla FC.
Desde entonces, no han dejado de sucederse las informaciones en uno u otro sentido sobre la guerra abierta por la presidencia existente hoy día entre los dos grandes grupos accionariales que conviven en la planta noble del Sánchez-Pizjuán: el liderado por el actual presidente José Castro y el encabezado por el expresidente José María del Nido. Todo ello, con la inestimable ayuda de un actor foráneo al que actualmente denominan erróneamente como ‘Los americanos’ -más adelante explicaremos por qué-.
Una lucha por el poder del Sevilla FC que vengo siguiendo de cerca desde años atrás y que en algún u otro momento me ha generado algún quebradero de cabeza, como cuando en diciembre de 2018 publiqué La venta del Sevilla, al descubierto. Un reportaje que en su momento generó el enfado de ciertas figuras dentro del sevillismo que, de una u otra manera, se sintieron señalados, con lo que eso supuso para mí como periodista a la hora de intentar seguir acudiendo a esas fuentes de información.
En alguna ocasión he tenido interés de tratar este controvertido tema en este humilde blog, por lo que ahora, visto lo visto, cobra especial relevancia. Informaciones al respecto hay muchas en los últimos días, y todas, o prácticamente todas, interesadas. Y es que en función de quién sea la fuente, la verdad (su verdad) irá más o menos encaminada hacia uno de los dos grandes actores principales, Del Nido o Castro.
Por eso, hoy me he lanzado a contar lo mucho o poco que sé del tema, intentando resolver dudas o aclarar conceptos que en los últimos días han salido a la luz con mayor o menor precisión bajo mi juicio. Y es que repito, según a quien se le pregunte, la historia o verdad tiene unos matices u otros.
Por todo ello, creo que resulta relevante también conocer la versión de ‘Los Americanos’, a los cual tengo acceso desde que en diciembre de 2018 pudiera entablar relación con algunos: La defensa de Sevillistas Unidos 2020.
Antes de todo, dejando claro siempre que un servidor no tiene intención alguna de defender ni atacar a uno ni otro bando y que con este artículo no hay mayor interés que el de hacer periodismo. Es decir, a partir de ahora no leerás sobre una guerra entre sevillistas buenos y malos, sino entre empresarios que quieren hacer valer el mucho dinero que han invertido en el club. Guste más o menos al sevillismo, el fútbol, hoy día, es eso, un negocio.
¿Quiénes son ‘Los Americanos’?
Cuando hablamos de ‘Los Americanos’ nos referimos al grupo de Accionistas Unidos 2020, capital extranjero que en 2018 entró en el Sevilla FC comprando acciones para defender los intereses económicos del presidente José Castro ante uno de los (muchos) intentos de arrebatarle la presidencia Del Nido. Andrés Blazquez es su representante en el consejo.
Hasta la fecha, y a una respuesta del presidente a pregunta de los pequeños accionistas en la junta de 2019 me remito, se negaba en todo momento la relación de Sevillistas Unidos con un fondo inversor americano, Steven W. Pasko o los inversores que estaban metidos en el Girondins; negativas que actualmente se obvian, refiriéndose a ellos sin tapujos como ‘Los Americanos’. ¿Por qué antes no y ahora sí?
Pues comencemos a resolver dudas. Algunas más obvias que otras:
- Sí, en SU2020 hay americanos.
- Pasko es propietario del 50% de la sociedad 777 Partners, de la que a su vez depende SUS2020.
- Pasko también tiene intereses económicos en el Girondins, pero eso no quiere decir que haya ningún tipo de relación directa entre uno y otro club, como se hizo querer ver por ciertos sectores con el fichaje de Koundé.
Tranquilo, sé que hasta el momento tampoco hemos descubierto la pólvora, pues son informaciones que en mayor o menor medida eran conocidas por muchos.
El problema es que ahora se habla de americanos, cuando también son varios los sevillanos y sevillistas que forman SU2020 o cuando, por ejemplo, se podría hablar también de judíos. Pues ese, un judío, es el propietario último de ese fondo inversor que en última instancia está tras este porcentaje accionarial del Sevilla FC. Algo nada extraño, por otro lado, pues no existe actualmente un fondo inversor realmente serio que no tenga tras él a un judío, y éste lo es, con 4.500 millones de euros a disposición. Sí, 4.500 kilos.
Es decir, para que nos hagamos una idea. Pasko está, pero no es más que un inversor relativamente menor dentro de ese gran fondo inversor. Por aclarar conceptos, el fondo inversor del Girondins, en el que está Pasko, también preguntó en su momento por el Sevilla FC; disponía de 50 millones de euros. No les alcanzaba para lo que pretendían.
¿Por qué ‘Los Americanos’ han cambiado de bando’?
Llegados a este punto, la pregunta de muchos ahora será por qué ‘Los Americanos’ han acabado cambiando de bando, si en principio entraron apoyando a Castro para evitar el control de Del Nido. La respuesta es obvia: dinero.
Resumiendo la explicación al máximo, un fondo inversor hace las veces de banco o, más bien, de prestamista. Invierte dinero para recuperarlo con creces en un tiempo relativamente corto, pues hablamos de una serie de años.
Cuando estos señores entraran en 2018 en el club comprando acciones a 1.500 euros cada una, lo hicieron bajo la promesa de salir vendiéndolas a cambio 3.000-3.500 euros. Entre sus múltiples planes, por ejemplo, también se encontraban (y siguen encontrando) construir un nuevo estadio cinco estrellas o una ciudad deportiva con un hotel en ella, lo que ampliaría las líneas de negocio y (les) generaría aún más riquezas. ¿Qué se encontraron en cambio? Pues que tras haber sido útiles durante la junta de 2018, se habían visto ligeramente arrinconados con su algo más del 6% del accionariado, recibiendo algo menos de 250.000 euros por ejercicio gracias al reparto de dividendos. Es decir, un negocio a pequeña escala que nada tiene que ver con la forma de funcionar de este tipo de grandes fondos. Ninguno invierte 10 millones de euros en un club de fútbol para recuperarlos a razón de 250.000 euros por año.
Eso, sumado al freno en el que se había convertido Castro con la reestructuración del Sánchez-Pìzjuán (y su negativa a la construcción de un nuevo estadio), el pacto por la gobernabilidad firmado entre Castro y Del Nido Junior y el incierto futuro económico por la covid-19 han supuesto un caldo de cultivo suficiente para que un ambicioso Del Nido haya sabido jugar sus bazas, rompiendo lo firmado por su hijo -mucho más moderado que él- y le haya arrebatado a Castro a uno de sus socios de gobierno más potentes.
Un caballo de Troya que no es la primera vez con la que le toca lidiar a Castro. Ya le ocurriría algo similar años atrás con el notario José María Manzano, quien entró en el club como mano derecha del presidente Pepe Castro y posteriormente acabó haciéndose afín a Del Nido hasta el punto de, actualmente, en su segunda etapa en el consejo, representar parte de sus acciones del Sevilla FC. Es habitual, también, que en su notaría se firmen todas las actividades referentes a los movimientos del letrado hispalense.
Nada de empate técnico y… atentos al futuro de Carrión
Aclaradas las posiciones actualmente, varias son las informaciones que hablan de un empate técnico entre los dos grandes grupos, algo que, en cambio, resultaría totalmente imposible según la nueva alianza. Pues Castro, según siempre estas versiones, habría perdido algunos de sus apoyos principales más allá de Sevillistas Unidos 2020, que estaría por encima del 8% que se les atribuye y que rondaría el 10%. Entre otras cosas, porque no han dejado de comprar tanto como grupo como a nivel individual, teniendo el señor Blázquez, por ejemplo, un 1% a título particular, así como otros socios que rondarían ya el 0’5%.
A Del Nido, con el apoyo de ‘Los Americanos’, se le atribuye el control de 42.000 acciones; es decir un 42%. Acciones que, en propiedad, teniendo en cuenta también aquellas que ha vendido a terceros pero de las que mantiene su control, tendría un 34%-35%. Justo lo mismo que controla Castro y su grupo (19%) , junto al apoyo de Carrión (15%).
Lo más inquietante ahora radica en saber cuál será el rumbo que tome Carrión con su 15%, siendo muchas las fuentes que hablan de que está estudiando también la posibilidad de alternar su apoyo, algo que desde el núcleo duro de Castro, en cambio, niegan rotundamente a un servidor: «Está al cien por cien con nosotros». Filtraciones que, como entenderán, van acompañadas de muchos otros argumentos que aquí no pueden ni deben comentarse, no sólo porque no hay intención de posicionarse con nadie, sino porque también podrían acarrear algún tipo de problema o inconveniente legal a este humilde blog.
Más claro, en cambio, lo sigue teniendo Carolina Alés, fiel a la memoria de su padre y a la figura de Castro. Pese a ello, consta a esta humilde casa que son continuos los intentos por hacerle ver lo acertado que supondría su cambio de signo. Por ahora, en cambio, parece mucho más reacia que Carrión, quien aún con el bando de Castro podría estar poniendo en una balanza los pro y los contra de que Del Nido acabe asaltando la presidencia, como muchos se temen.
En ese supuesto, el fin último de ‘Los Americanos’ será evitar que el club se descapitalice a razón de repartirse el 1% de la cifra de negocio (dos millones de euros) por curso y convertir al Sevilla FC en unos años en el primer club español en salir a bolsa, lo que les acabaría reportando importantes beneficios. Y es que, a nadie se le olvide, éste es el fin último de todos los movimientos: hacer negocio. ¿Lo conseguirán? Todo está en manos de Del Nido, un socio complicado de controlar.
Alejandro Sáez 
Pues no puede venir en peor momento, coño
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